Pues bien hoy decidí, por fin,
dejar salir todas esas ideas grandes –o no- de mi mente y plasmarlas en un
blog, no pretendo ser el más leído, informado o influyente de la red, solo
compartir todos esos pensamientos que bien podrían ser útiles a todo aquel que
desee darme algo de su tiempo leyendo estas líneas.
La meta del
blog es difundir esa gran idea que le da nombre al sitio: Pensar libre. Esto no
es sinónimo de dejar volar la imaginación, es más bien, entre otras cosas
permitirse observar las situaciones a las que nos enfrentamos de una manera
diferente, no la convencional y tradicional a la que –y en general- la
sociedad, medios y entorno nos obligan.
El lector
podría decir, a modo de sarcasmo –Oh, nos vas a quitar la venda de los ojos,
¿eres acaso el mesías que necesitamos?- No. No pretendo descubrir el hilo negro,
solo invitarlos a reflexionar sobre aquello que nos afecta en nuestra vida
diaria, probablemente sean cosas que usted ya conozca, probablemente no; lo
importante es tener una visión más amplia de ése panorama, pues le sorprenderá
saber que algunas cosas no son tan obvias como creemos; Sin más palabrerías ni rollos pseudo-filosóficos, los dejo para que continúen, si así lo
desean, leyendo un poco más…