viernes, 4 de julio de 2014

La cultura de la mediocridad

Con el paso de los días es más evidente que la mayoría esta educado para ser mediocre, un simple conformista que ante cualquier esfuerzo por mínimo que sea; cree que debe ser elogiado y admirado.
                Y el ejemplo claro y latente es la selección nacional, un equipo que no hizo anda diferente a los demás mundiales, y recibe elogios por su esfuerzo… ¿Cuándo comprenderán que lo importante jamás será el esfuerzo, sino el resultado? De buenas intenciones están llenos los panteones.
                Y el ejemplo no para ahí, lo vemos a diario niños, atletas, científicos y demás gente que usan exactamente el mismo pretexto para defenderse ante sus fracasos... “La intención es lo que cuenta” lo cual no es más que un pretexto, y debo decir que fracasar no es malo, de hecho es una de las formas para llegar al éxito, cada fracaso es una enseñanza para saber que alguna decisión es incorrecta y se debe cambiar el rumbo. Pero cuando se usas pretextos falaces como ese, sólo se engaña a uno mismo y se hunde más y más en el conformismo.
                Como casi siempre daré un ejemplo algo burdo y hasta grotesco pero que sirve perfectamente para entender la situación: Si un familiar está en el hospital, y entra a cirugía; ¿usted confía sólo en que el medico tenga las buenas intenciones de hacer bien su trabajo? La respuesta es no, usted no confía en sus intenciones, está seguro de que el cirujano hará hasta lo imposible por salvar la vida del paciente y todo saldrá perfecto.
                Cuando las personas comprendan de que tener buenas intenciones no basta, hace falta hacerlo todo bien, entonces las cosas serán mejores; porque al final, lo único que se les pide no es otra cosa que hacer BIEN su trabajo.
                Dígame ¿de qué le sirve que un gobernante tenga las buenas intenciones de hacer bien su trabajo, si no cumple? ¿De qué sirve que el alumno diga que tenía intención de hace su trabajo, si al final solo reprueba por su falta de interés en su educación? ¿De qué sirve toda esa larga lista de pretextos, si era o no penal, si fue fraude, si hubo tráfico o lo que sea…? si al final el resultado es lo único importante
                Así es mis estimados lectores, lo único que importa es el resultado, porque al final, es lo que marca el éxito, es lo que separa a las personas victoriosas de los mediocres, porque una cosa es fracasar en el intento y otra es detenerse ahí y justificarse para no continuar. En general y metafóricamente hablando a la vida no le interesa cuanto se esfuerce, sino cuando se logra el objetivo.

“El éxito no es para aquellos que dicen que pueden hacer algo, sino para quienes lo hacen”

Emiliano Zapata

Estaríamos mejor con... la verdad no lo se

Después de tanto tiempo, de casi perder mi acceso y mis claves, aquí traigo un nuevo escrito, esta vez, inspirado en un todo y en nada;...