domingo, 15 de junio de 2014

Mi padre, un gran hombre

Así como hace semanas le dedique un post a mi madre, hoy es el turno de mi padre el otro gran ser que ha marcado mi vida, que no solo ha sido un padre, si un maestro, amigo y protector; aquel que aun hoy en día, y muy a su manera, me cuida y se preocupa por mí.
                De mi padre lo que más admiro es que siempre procuro darnos lo mejor, jamás se detuvo ni se nos limitó, muy al contrario, se olvidó muchas veces de sí mismo y sus necesidades con tal de que tuviéramos lo que necesitábamos. Aún recuerdo cuando trabajaba dobles turnos, pasaba menos de 6 horas en la casa, en las cuales debía comer, dormir y preparase para salir nuevamente al trabajo, pero jamás lo vi quejarse, de hecho no recuerdo ni una sola ocasión que no tuviera tiempo para nosotros por muy cansado que estuviera, siempre nos ayudaba o jugaba con nosotros.
                MI padre no es alguien que sepa estar quieto, cuando no está arreglando algún objeto que falle, está buscando nuevas formas de mejorarla casa, alguna lona que tape la luz del sol, mejorando las instalaciones de agua para optimizar el uso y no gastar en gas, cortando el pasto o lo que haga falta, y aun así se da tiempo para sus cosas y para lo que necesitemos.
                También recuerdo cuando me ayudaba en la escuela, explicándome problemas que yo no entendía, dedicando su tiempo sólo a mí, o cuando jugábamos con alguna consola no entendía muchos juegos pero aun así, jugábamos a las carreras o a veces jugábamos futbol en el jardín. Dedicaba horas a enseñarme, a explicarme cono funcionaban las cosas y en su caso como repararlas, de mi padre aprendí a no detenerme ente lo desconocido, a explorar y continuar, buscarle solución a mis problemas sin pedir ayuda.
                Una de las cosas que admiro de mi padre es su temple, parece que nada le afecta, no sé que pase por su mente en los momentos más lúgubres por los que hemos pasado; pero jamás, jamás lo he visto caer, he visto a mi padre feliz, enojado, serio molesto y un largo etc. Pero nunca lo he visto ni triste, derrotado o deprimido, si alguna vez lo ha estado, jamás lo supe, él siempre ha sido un pilar, “la roca” lo que a mí me ha hecho mantenerme un poco más firme ante varias situaciones.
                Algo que me sorprende de muchos es lo que piensan de la relación que tengo con mi padre, ya que la mayoría piensa que debo estar molesto con él por su forma de ser últimamente conmigo, pero no es así, comprendo porque lo hace, me ve detenido, en cierta forma fracasar como hijo y como ser humano, me regaña muchas veces, pero es su forma de decirme que no me quiere ver derrotado por la vida, que debo hacer algo. Así que sin importar lo que piensen los demás sí, me enojo un poco, pero sé que lo hace porque me quiere y desea algo mejor para mí.

                Para mí, mi padre es mi ídolo, de hecho debo confesar que tengo muchos sueños y metas en la vida, pero lo que en verdad deseo, es que, cuando tenga familia, quiero ser la mitad de hombre que es mi padre, ese es mi gran anhelo, quisiera ser capaz de hacer aunque sea la mitad de lo que hace mi padre y darle a mi familia lo mismo que él nos ha dado.

lunes, 9 de junio de 2014

El peso de las acciones

Hace unas semanas platicaba con alguien temas algo triviales, pero surgió un tema interesante: ¿Por qué cuando alguien actúa mal, es recordado por eso y no por todo lo demás que hizo de manera correcta? Cosa aún más evidente cuando es la última acción de cualquier ser humano. Pero… ¿a qué se debe?
                Una de las razones es que somos seres de orden, todo aquello que altere dicha armonía es lo que más se recuerda, no porque legue a ser terrible, sino por el hecho de ser algo diferente a lo que se estaba acostumbrado. Y es que no importa que ten ejemplar haya sido un sujeto en vida, ni que tantas buenas acciones haya hecho, si al final por error, deseo o simplemente por circunstancias comete algún acto fuera de lo normal, incluso algo tétrico, pues ese sujeto será recordado por eso y no por todo lo demás.
                Es algo simple, pero así funciona la sociedad, alguien puede ser caritativo toda su vida y nadie jamás lo recordará, pero el día que dicho sujeto falle todos lo notarán, y del mismo modo el que es malvado y cruel puede redimirse con un último acto de bondad; cosa que hace que todo lo anterior sea olvidado… una autentica lástima pero así nos han hecho.
                Ahora el hecho de que se esté acostumbrado a cierto orden, no significa que dicho orden sea bueno y por ejemplo podemos mostrar la sociedad actual y en general la que ha persistido –como organización de poder- por los últimos 600 años, donde se nos enseña que solo una persona debe tener poder y ello es correcto, los demás deben ser serviles y humildes, jamás se debe retar a las autoridades ya que ellas siempre tiene la razón y solo buscan nuestro bien; nunca serás digno de nada y sin importar tu situación siempre deberás estar agradecido tanto con alguna deidad que no te aplasta como un simple insecto, como con el gobierno que te da algunas migajas de todo lo que te corresponde, ya que lo hace por caridad…
                Aun así hubo personas que se rebelaron, cambiaron eso y le mostraron al mundo que a veces ese orden debía cambiar, aun hoy se estudian dichos levantamientos que cambiaron de una forma u otra la historia; los más relevantes fueron la revolución francesa de 1789 que trajo el fin de la monarquía –salvo por Napoleón que se coronó después- en esa nación, y llevo a Francia a ser el motor político europeo actual. Los rusos en 1917 pasaron a ser soviéticos depusieron al emperador y convirtieron a la URSS en una nación poderosa económica, política, y militarmente hablando. La mexicana de 1910 fue en un principio una mera revuelta por el poder, no buscaba ni igualdad, ni derechos ni nada, sólo que cambiaran las personas en el poder, y no es sino ya hasta avanzado el conflicto y cuando se suman los campesinos y bandoleros, es decir los grupos comandados por Zapata y Villa; que en verdad se buscó la justicia social que aun hoy perdura en los programas sociales que mal administran las diferentes secretarías de estado.
                Aun así esas acciones son las que se recuerdan, a nadie le importa lo que hizo Robespierre, sólo los ideales que dejó de libertad, igualdad y fraternidad, plasmados en la declaración de los derechos el hombre y el ciudadano. Pocos saben de Lenin antes del comisariado del pueblo y los bolcheviques, pero saben del desarrollo y la potencia que hoy es Rusia. Para muchos es aún desconocido el verdadero nombre de “Pancho” Villa y menos aún su pasado como criminal; pero para todos los mexicanos es un ejemplo, un símbolo y lo que todo verdadero revolucionario debería ser, un líder, amigo y compañero, que no buscaba su beneficio, sino el bienestar de los trabajadores y no de los grupos de poder.

                Es cierto, no todos pueden ser un Hidalgo, un Villa o un Zaragoza; pero tampoco es cosa de decisión, sino de convicción ¿de qué sirve que se esté inconforme, consciente de que el orden no es el correcto y qué en general las cosas están mal, si no se tiene el valor y las convicciones necesarias, para hacer que esas acciones resuenen en el futuro? ¿Cuándo serán las personas conscientes del peso de sus acciones? ¿En qué momento notarán que son millones luchando contra unos cuantos, que por mucho poder político que tengan, jamás serán tan poderosos como un pueblo entero? No se necesitan anarquistas, esos son una simple falla, se necesita gente de principios y con valor, que sepa que puede y debe hacer algo.

viernes, 6 de junio de 2014

Ansina semos...

El post de hoy está dedicado a una persona que de algún modo llego a mi vida, mas por el azar y casi como un capricho del destino. De algún modo logró tocar algunas de mis fibras más sensibles y en diversas ocasiones debo decir que para nada bueno. Aun así, con el tiempo le he tomado aprecio, no un gran afecto, pero si una estima; no sé porque la vida lo pone en mi camino, pero supongo que algún plan hay, nada en esta vida es casualidad.
A.      Ansina eres:
Algo en lo que debo hacer hincapié es que mientras las personas no aprendan a aceptarse y aceptar su pasado tal cual es, no podrán tener un presente y un futuro tranquilos, y no me refiero a conformarse con lo que uno posee… Hago referencia a conocerse, aprender y conocer sus límites, lo que se está o no dispuesto a hacer, a quererse tal cual es, si no posee alguna virtud, es porque no la necesita, no somos perfectos, cada uno tiene lo necesario para destacar, solo es cuestión de aprender a usar la habilidades que se poseen. Y por otro lado, cada error y acierto, cada momento bueno y malo, lo que se hizo o no, es parte de lo que ha quedado atrás y si no lo podemos cambiar, ni le podemos poner remedio ¿De qué sirve angustiarse o vivir con temores, recuerdos que ya no nos sirven para nada? Y repito una cosa es mantener el pasado en donde debe estar y otra muy diferente olvidar, se debe aprender y tomar de las situaciones que se puedan y continuar… No es cosa sencilla, pero nadie dijo que fuera fácil, vivir es difícil y sólo aquellos que aprenden de la vida son los que con orgullo alcanzan sus metas, los demás están condenados a ser simples espectadores.
B.      Ansina es:
Todos en esta vida tienen su pasado, cosas positivas o negativas, somos en esencia suma y consecuencia de cada uno de nuestros actos, las apariencias pueden engañar, pero al final, no importa lo que se diga o se finja ser, todo sale a la luz. Así pues todos tienen una historia, nadie es un libro en blanco en el cual escribir lo que se quiera pues al final, nadie está hecho a medida para complacer los caprichos de absolutamente nadie. Ya que como ideal es bonito, pero es aún mejor aprender de los demás, aceptar que todos tienen su pasado y eso es mucho más interesante y estimulante. Como lo he escrito antes, nadie es la media naranja de nadie, porque no somos seres incompletos, ninguno está dispuesto a sacrificarse solo por dar gusto… la vida no pone en nuestro camino a quien cumpla lo que se quiera, sino a quien se necesita. Puede ser la persona más extraña del mundo sin ninguna cualidad en particular o sin ningún interés común; pero no por eso se debe alejar, probablemente sea la única persona dispuesta a estar ahí cuando todos los demás fallen.
C.      Ansina son:
La rebeldía y el desdén por las normas y leyes –aun las no-escritas- podría bien ser su carta de presentación; y es que no importa cuánto se los advierta, siempre preferirán las cosas a su modo, de hecho cuando se les plantea algunos límites, en vez de pensar como mantenerse en ellos,  ya están pensando la forma en romper todas las reglas, muy  probablemente por simple satisfacción y ganas de demostrar que nadie los puede detener. Pero se han olvidado de una parte muy importante, ser libre no significa hacer lo que quieres, cuando quieres y sin responderle a nadie; aun, y muy a su pesar, existen normas que nadie debe romper y menos por que sí. Ser libre es poder actuar sin limitarse, pero a su vez es estar consciente de que hay cosas y situaciones de las que no se puede escapar. Ser libre y ser responsable van de la mano, ya que no se puede ir por el mundo haciendo lo que venga en gana y jamás enfrentar las consecuencias… tarde o temprano la vida los alcanza y hace que paguen todas y cada una sus culpas, de eso nadie puede huir.
D.      Y ansina semos:

Diferentes edades, diferentes modos de pensar, y diferentes estilos, todo al final hace las cosas más interesantes, porque si todos fuéramos iguales que mundo tan aburrido seria este, pero eso del mismo modo hace que las cosas se perciban de manera diferente, que la respuesta adecuada para cada uno sea diferente y eso hace que el conflicto sea  latente, pero lo importante no es eso, sino adecuarse y compartir lo que hay en común y aprender un poco de lo que no lo es. Confianza, libertad y rebeldía son las palabras claves en ésta pequeña sociedad que se ha formado, sólo recuerden que aquel que traicione, limite o engañe es el que saldrá perdiendo. Al final cada uno decide lo que hace o no, pero todos deben estar conscientes que nada es gratis en este mundo y al final se deben afrontar todas las consecuencias que ello traiga.

miércoles, 4 de junio de 2014

Cuestión de prioridades

Este es un tema recurrente en el blog, una y otra vez lo he escrito, y creo que jamás será suficiente para expresar esa frustración que siento al ver que el mayor problema no es ni la desidia ni la falta de ganas, ni mucho menos es la motivación. El gran problema de la sociedad –y para casi todos sus problemas- es que no le preocupa lo que en verdad importa.
                Es lamentable ver, por dar un ejemplo, que con tal de ver el partido o las novelas, hacen hasta lo imposible por reparar la TV, buscan maneras ingeniosas de hacerla funcionar y captar la señal, y por fin disfrutar de un momento de entretenimiento; pero por esa fuga de agua, ese techo ya manchado por tanta agua estancada en la azotea o ese cable en cortocircuito; nadie, absolutamente nadie hace nada.
                Y es que se nota desde lejos que la sociedad no se preocupa por lo que le sucede, al menos no por los temas trascendentales y que realmente afectan el porvenir de todos, por ejemplo si esos mismos que salen a peregrinar cada 12 de diciembre, lo hicieran por buscar un gobierno justo… ¿Ustedes creen que seguiríamos con las mismas arpías en el poder? ¿Porqué para defender y seguir a una deidad, si son millones, que tienen el valor, tiempo y ganas, pero cuando se trata de su nación y el futuro de los suyos, simplemente no son nada, no tienen ni tiempo, ni ganas ni siquiera un mínimo interés?
                Es por eso que decía que todo es cuestión de prioridades, ya que para las cosas más triviales, las personas ponen todo su empeño, esfuerzo y determinación, pero cuando es estudio, trabajo o simplemente un logro personal; pocos, muy pocos son los que realmente siguen adelante, y lo peor no es eso; si no que algunos hasta son señalados, como si fuera un crimen buscar algo mejor.
                Como lo escribí en un post anterior, la mayoría ya no busca como estar mejor, si no que de al lado este peor, si el compañero tiene algún logro, destaca en algo o simplemente es mejor –aunque les duela, hay quienes son mejores, lo sé, lo saben pero prefieren decir que todos son iguales- buscan el error, o la falla, o inclusive la crítica con tal de opacar cualquier victoria por pírrica que sea.
                El mayor problema de la sociedad es que aún no se da cuenta, de que en verdad es ella la que tiene el poder, son millones y pueden lograr lo que sea, pero se conforman con echarle la culpa la de al lado, con hacer lo menos posible y delegar todo en un desconocido, y cuando éste falla, prefiere dejarlo que buscar algo mejor, y no por que no pueda cambiarlos, sino porque prefiere la comodidad de quedarse así que movilizarse aun cuando eso la lleve al desastre.

                LA cuestión y lo hace entrar en cólera a más de uno, es que muchos piensan ya en la competencia deportiva que se acerca, de la cual ellos no sacarán ni un beneficio, pero de las reformas que están por cambiar en definitiva el sistema económico y empobrecerán más a un pueblo miserable, de eso nadie, prácticamente nadie se preocupa ni está dispuesto a hacer algo… y es muy irónico que una nación que presume de amplios recursos petroleros, minerales y, de una naturaleza y clima exuberantes, de ser la envidia de gran parte del planeta, tenga uno de los mayores índices de pobreza de los países desarrollados, y más aún que tenga a los hombres más ricos del mundo, sea sede de millonarias compañías y aun así existan zonas con un índice de desarrollo humano, aún por debajo de naciones africanas. Es una nación de contrastes y en la que todos prefieren voltear a otro lado antes que aceptar su realidad…

Estaríamos mejor con... la verdad no lo se

Después de tanto tiempo, de casi perder mi acceso y mis claves, aquí traigo un nuevo escrito, esta vez, inspirado en un todo y en nada;...