sábado, 18 de enero de 2014

Los hijos son prestados

Así es mis estimados lectores, bastante post atrás hacia hincapié en los errores que cometen muchos padres al educar a sus pequeños “retoños” ya que ni nacemos con conocimientos sobre ser buen padre ni como ser un hijo perfecto; por lo tanto hay muchos obstáculos que sortear.
                Peor aún hay padres que creen que por el simple hecho de serlo, todo lo que hacen es correcto y nadie puede cuestionarlos; cierto es que tampoco le van a pedir opiniones a cualquier persona, pero y del mismo modo, tampoco se convertirán de la noche a la mañana en unos grandes padres. Como todo en esta vida, se aprende con el paso del tiempo y a base de ensayo y error; más aún cuando cada hijo es un mundo, ya que tienen personalidades y caracteres diferentes, lo que le puede servir a uno, no necesariamente le va funcionar a otro.
                Otra gran realidad, es que si bien son sus hijos, no son un objeto, no son de su propiedad, por lo cual no pueden hacer con ellos lo que les venga en gana, y esto viene al tema, ya que hay quienes piensan que pueden arruinar vidas simplemente porque si… pues mis estimados les tengo una noticia, podrán ser sus hijos, pero la vida es de ellos y por muy padres que sean jamás tendrán el derecho de arruinarles la vida, ni de hacer lo que les parezca con ellos.
                Se debe tener muy en cuenta que sin importar la edad que tengan los hijos, el deber de todo padre y madre, es velar por su bienestar y felicidad; claro está que siempre habrá tanto sus límites como limitaciones, es decir se les puede dar lo que necesitan, pero también se les debe enseñar que ellos deben ser capaces de buscarlo por sí mismos. Y del mismo modo enseñarles que no pueden tenerlo todo, en ocasiones y aun que así se desee, no es posible darles todo.
                Otro aspecto a tener en cuenta es que se debe comprender perfectamente la etapa en la que se encuentran los hijos, por darles un ejemplo les diré que es frustrante ver a madres regañar fuerte mente (legando incluso a los golpes) a niños que aún no llegan ni a los 4 años por que se ensucian, vamos señores y señoras, son niños, su único deber es jugar y si eso incluye ensuciarse un poco –o mucho- que así sea. Ya después y de apoco se debe inculcar el valor de las cosas, el ser limpios y ser ordenados. En resumen cada cosa a su tiempo.

Ya por ultimo le recuerdo que todo en esta vida tiene sus consecuencias, y tarde o temprano esos errores que cometió, lo que hizo o dejo de hacer le pasaran factura. Recuerde muy bien que todos y cada uno de nosotros no somos, sino la consecuencia de todos nuestros actos.

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